Ese hombre que en un primer momento fue prudente y diplomático, ahora ha acabado hasta los mismísimos de toda la hipocresía que rodea la industria audiovisual en España, y ha conseguido ganarse a todos los internautas y a todos los que tienen dos dedos de frente.
Alex de la Iglesia ha comunicado que dejará la Academia de Cine, si es que esto se veía que iba a acabar así, un tío inteligente como Alex de la Iglesia no podía acabar en ese mundillo tan oscuro y pintoresco donde una guionista de dudosa reputación acaba siendo Menestra de Verduras y consigue aprobar la ley que le venga en gana, una ley promovida por los intereses de otro país, apoyada por esos que se creen que la cultura es suya y pueden poner los cánones que le salgan de ahí abajo para cobrar a todo el mundo y por los caciques de la industria musical que se exilian para evadir impuestos.
Por cierto esta película la hemos visto todos, es solo una segunda parte. La primera fue «Las increíbles aventuras de la SGAE y su compañero el Canon» y ahora de la mano de unos productores de EE.UU. llega la esperadísima «La Ley Sinde».
Y así seguimos, dejando que nos la metan doblada. Un día nos vamos a cansar…
Por cierto, lo de Alex se veía venir…
Pablo García
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